El Body Roll es más que una técnica de liberación muscular: para obtener los máximos beneficios, es importante preparar el cuerpo con buena alimentación e hidratación. Esto optimiza la recuperación, reduce molestias y potencia los efectos del masaje miofascial.
Alimentación antes del Body Roll
Comidas ligeras: evita alimentos pesados o muy grasos antes de la sesión.
Carbohidratos complejos: avena, frutas o pan integral proporcionan energía sin generar pesadez.
Proteínas moderadas: yogur, huevos o frutos secos ayudan a mantener los músculos listos para el trabajo.
Hidratación
Agua suficiente: beber 30-60 minutos antes de la sesión mejora la elasticidad muscular y la circulación.
Electrolitos si es necesario: tras entrenamientos intensos, incluir una bebida con sales minerales favorece la recuperación.
Consejos post-Body Roll
Hidratación continua: ayuda a eliminar toxinas liberadas durante el rodillo.
Snack rico en proteínas: acelera la reparación muscular si se combinó con actividad física.
Alimentos antiinflamatorios: frutos rojos, cúrcuma o té verde reducen la inflamación y mejoran la recuperación.
Prepararte correctamente para el Body Roll no solo potencia sus efectos sobre músculos y fascia, sino que también favorece la energía, la recuperación y el bienestar general durante y después de la sesión.